Septiembre 10 de 1635.

(Tom. 111, fol. 59.)

Pax Christi &c. De Italia, por carta escrita al duque de Arcos de 12 de agosto, se avisa que la liga contra España está declarada: los coligados son el de Francia, que por tentar su última fortuna ha convocado toda la nobleza de Francia, significándoles el miserable estado de sus cosas y su reputación perdida en Alemania, Flandes y Lorena, donde ha perdido en un día lo que en muchos años había ganado, siendo su ruina fatal el infante D. Fernando. Dicen los niños en Roma (tan público es como esto) que el Papa le envió socorro, y muy grande. Llega a él el Saboyano con seis mil hombres y doscientos caballos; Parma con cinco mil infantes y ciento cincuenta caballos; Venecia a lo en cubierto da quince mil infantes, y a la gente que estaba en la Valtelina ocho mil salmas de trigo, que son quince mil fanegas.

El Estado de Milán tiene hoy quince mil hombres de guerra y dos mil caballos, y viendo que en Italia hay cinco mil franceses, se pide nuevo socorro al duque de Florencia que ha servido a S. M. con el servicio que suele y debe, que son cuatro mil infantes y seiscientos caballos, los dos mil son toscanos, los dos mil esguízaros. Luca ha dado mil hombres; y aunque le pese a Génova, ha de servir a España en todo, porque hay opinión que aquella Republica debajo de cuerda ayuda a Francia, de que se ha seguido que S. M. no ha querido admitir la disculpa que el embajador de Génova le daba, antes lo despidió con ásperas palabras. Este es el estado de Italia.

 De Alemania dicen que el duque de Sajonia iba con mucha gente a allanar al de Pomerania y Brandemburgo, que no vinieron en las paces.

Que después que se entregó la ciudad de Augusta con las demás circunvecinas se hizo registro general de toda la gente que se halló en ella, hasta las criaturas que mamaban, y se hallaron solas diez y ocho mil almas, habiéndose hallado en el registro que hicieron los enemigos apoderándose de esta ciudad ciento ochenta mil almas.

Llegaron al duque de Lorena catorce mil alemanes y cuatro mil caballos, con que ha engrosado su ejército y puesto al de Francia en extremo de miseria.

El conde Matías Galasso quedaba vencedor en una rota que dio al duque de Weimar de Sajonia [Bernardo de Sajonia-Weimar] (no es este el elector), dejándole destruido; que pretendió impedirle el paso en el Rin para que no llegase a Francia, con que el señor rey de Hungría se elegirá por César y rey de Romanos sin contradicción, siendo con S. M. continuados doce emperadores de la casa de Austria.

La armada del marqués de Santa Cruz ha puesto en tanto cuidado a las riberas de Francia, que no saben que hacerse, trayéndolos desvelados, no sabiendo dónde ha de ir el golpe, y teniendo sus bajeles armados en sus puertos sin saber dónde moverse ni poderlo hacer, quitándoles el trato y comercio de Levante.

 El duque de Fernandina partió de Barcelona con trece galeras de España, llevando en ellas los tres mil soldados que vinieron de Mallorca, y se va a juntar con el de Santa Cruz para hacer lo que se pretende, y concuerdan todos que para la primavera sacará el rey Nuestro Señor tan grandes ejércitos que espantará al mundo.

Guarde Dios a V. R. como yo deseo. Madrid y septiembre 10 de 1635. = Sebastián González. =Al P. Rafael Pereyra.

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