Claudio Clemente / Letters / Madrid

carta_90

Madrid y febrero 23 de 1635.

(Tom. 111, fol. 6 v)

Lo único que se sabe es que los franceses habiendo corrompido a los que estaban en el presidio de Gravelinas y los del pueblo, estaban ya para entregar la fuerza; sabiéndolo el Sr. Infante, despachó muy de priesa al marqués de Aytona, el cual entró en el lugar y prendió al Gobernador, y luego llegó allí el Sr. Infante y están fortalecidas aquellas plazas.

Ha llegado la adjunta relación de la toma de Philippsburg, de que remito copia.

Relación de la toma de Philippsburg. Bruselas 5 de febrero de 1635.

A 22 de enero el coronel Bamberg, imperialista, envió a Philippsburg muchas pipas de vino sobre unos carros llevados por soldados vestidos de carreteros, los cuales decían que mejor les estaría dar barato su vino que no de aguardar a caer en manos de los imperiales, de los cuales sacarían aún menos. Con esto entraron y dieron su vino tan barato que a la noche del día 24 de enero les quedó muy poco, habiéndolo bebido los soldados del presidio. Dormidos y también descuidados por haber visto los pantanos llenos de agua, los carreteros se juntaron y cogidos dos a tres cuerpos de guardia, los degollaron a todos sin ruido alguno, y luego con esto entraron a la dicha plaza 4, 000 imperiales por escalada, después de pasados aquellos pantanos sobre tablones que tenían prevenidos. Luego acabaron de matar 600 franceses que ahí estaban con 400 alemanes por el elector de Tréveris, los cuales habiéndose recogido a una torre pidieron partido y se lo dieron. En aquella plaza y castillo han hallado cien piezas de artillería de bronce, dos mil maldres de harina y diez mil de trigo, provisiones de carne, vino y otros mantenimientos, con munición de guerra para sustentar un sitio de tres años, fuera de otras municiones para la próxima campaña, y por bueno dejo doscientos mil doblones. Con esta quedan enfrenados los contrarios. En esta empresa se hallaron el coronel Bamberger y Juan Bret [Jean de Werth]. Esta nueva es cierta y confirmada por los más finos calvinistas de Fráncfort: tanto importa esta toma como la batalla de Nördlingen.

=Claudio Clemente. =Al P. Rafael Pereyra de la Compañía de Jesús.

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