Madrid y octubre 6 de 1635.

(Tom. 111, fol. 93 v.)

Pax Christi, etc. De Flandes avisan que todos los mercaderes del país se iban con sus haciendas a Inglaterra y otras partes.

Que los franceses habían levantado en el país de Lieja 500 caballos, con el trozo del ejército que había quedado en Holanda, y que los degollaron los villanos de Namur sin que dejasen más de 13 o 14.

Que, de 30, 000 franceses que habían entrado en Flandes no habían quedado sino 6, 000 y esos inútiles.

El duque de Módena se declaró por S. M. con condición de poner guarnición suya en Corebo, lugar suyo que por feudo de Milán solía tener guarnición en él, y está en el de Módena.

Los imperiales en Alemania habían tomado a Mannheim, la fuerza mejor en el Palatinado superior, gran fuerza y de mucha conveniencia para Baviera, porque está en la parte que toca a él.

El duque de Lorena había engrosado su ejército y era el cuidado más vivo de los franceses, y tanto, que habían determinado que fuese el rey en persona a aquella expedición: El Papa envió al duque de Parma una embajada con el vice-legado de Bolonia, diciéndole que dejase las armas y no pusiese en peligro su Estado, pues era feudo de la Iglesia. Los maliciosos avisan que esto es prevenirse para enviar cinco o seis mil hombres a título de defender aquel feudo de la iglesia, y es cierto que los más bien intencionados podrían prevenir este daño sobre tantos experimentados.

Aquí se ha sabido como el rey de Polonia no había concluido con la tregua los suecos, por algunas diferencias que hubo, y es la nueva de mayor conveniencia que hoy puede tener España, y de que están todos muy contentos.

En el canal de Inglaterra andaban 26 bajeles de turcos de Argel, enviados a llamar por el cristianísimo cardenal Ochali y habían tomado seis de los ingleses; si por aquí se asiesen Francia e Inglaterra seria gran negocio. Desesperada alma tiene aquel buen cardenal.

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